20061026

¿Es HETEROFOBIA o solamente el ENFOQUE de MODA?

Medio: El Pais y otros
Fecha: 22 de octubre de 2006 y siguientes
Ubicación: NR

La historia no es tan compleja como algunos han querido presentarla. Su guión puede ser este:

· Un bar, en Sevilla, a las tantas de la mañana.
· Una pareja de chicos, ansiosos el uno del otro, que se hace arrumacos que se besa, que se toca.
· Una gente, la clientela, evidentemente maleducada, víctima de la histórica moral pública impuesta en nuestro país por los católicos, que se incomoda por tanto deseo exhibido; y que protesta.
· Un dueño de bar que, cumpliendo con el papel que se espera de él, llama la atención de los amantes: busca el equilibrio.
· Unos enamorados, homosexuales esta vez, que se ven agredidos por la protesta.
· Un detalle excesivo: unos agredidos encantados con la posibilidad de ascender a un leve estrellato mediático si convierten su inconveniencia en ejemplo de victimario. Homofóbia, dicen. No compostura -estúpida, sí, pero compostura al fin-, sino homofobia...

Los chicos dicen ante el juez que el dueño del bar los insultó y los amenazó severamente, los otros presentes lo niegan. El del bar dice que nada de eso, que lleva años en la zona, la Alameda, tratando con gente de toda condición, de toda orientación, que sus amigos son "gays"...

Los testigos niegan la mayor y son discretos. Los acusadores acuden a la prensa, además de al juez.

Al final, sentencia: no hubo caso y el juez increpa al abogado de los acusadores por el tratamiento espectacular con que ha planteado el asunto.

Aún así, el diario El País del domingo 22 bien que daba por sentado el caso de homofobia, que sus redactores ya habrían juzgado. Peso a todo, la prensa posterior desoye la resolución y sigue encaramada a la percha del escándalo -usando la tipología del delito ya descartado- , que tan bien le viene para vender papel. ¿Como, si no?, ¿qué enfoque de la historia podría ocupar hasta la contra del diario mas serio de este país?.

El Pastor que esto escribe conoce el caso de primera: lo malo no es la exagerada actitud de unas hombres con demasiado afán de protagonismo -de esos está llena la televisión estos tiempos- sino la actitud poco limpia de los periódicos al tratarlo. En algunos, incluso contraria a sus propios libros de estilo, que se ven como papel mojado... En fin, tan superficial como la moda: pasarán los detalles, lo esencial no se habrá movido.


PS.- Quizá debamos disparar más alto y comenzar a pelear por el derecho a poder amarnos en cualquier sitio, sin que las caricias supongan escándalo alguno, sin que los besos provoquen otra cosa que la envidia... es una cuestión de costumbre social. A todos nos iría mejor.